El viernes 22 de noviembre, Pampita se casará con Roberto García Moritán. Con poco más de dos meses de noviazgo, la modelo y el empresario darán el sí. Lo cierto es que las amigas de la novia fueron las encargadas de organizar la despedida de soltera este jueves por la noche.
En todo momento, Pampita se mostró sonriente y predispuesta a recibir el cariño de la gente que se acercó al lugar para desearle toda la suerte en esta nueva etapa de su vida.
Pampita había puesto dos condiciones que no era negociables: nada de celulares ni de strippers. El evento tenía que ser una reunión para disfrutar entre amigas, para celebrar la vida rodeada de sus hermanas de la vida. "Lo que pasa ahí queda ahí", sentenció la modelo en su programa.
Primero, cena y tragos en Bagatelle, ubicado en el Hipódromo de Palermo. Luego, disfrazadas, fueron a bailar a una disco de la Costanera (Tequila). Pero sin dudas, lo que más llamó la atención fue el look de Pampita: una sexy novia con transparencias, encajes y portaligas
Como ambos ya se casaron anteriormente, se casarán por civil y luego tendrán una bendición. La cena, será en el Palacio San Souci y contará con 130 invitados, solo los más íntimos. Después de la medianoche, se abrirán las puertas para que ingresen los amigos. La consigna es bailar hasta que salga el sol.
"Va a haber comida peruana, que se relaciona con los restaurantes de Robert y lo habitual en las bodas", dijo Pampita a LAM.
La modelo solo había puesto dos reglas: nada de celulares ni de strippers y sus amigas cumplieron.
El vestido: "Todavía no sé si usaré solo un vestido o me voy a cambiar. Algunas amigas me recomiendan que use uno, otras que me cambie", dijo Pampita.
La organización de la despedida de soltera estuvo a cargo de la DJ Puli Demaría. Ella, además, fue una de las amigas de la jurado del Bailando que ayudó al flamante novio a organizar la espectacular propuesta de matrimonio en la playa que incluyó velas, una violinista y letras gigantes que decían "casate conmigo". "Ellas fueron cómplices y lo ayudaron un poco porque no sabía por dónde empezar y cómo hacer. Entre todas le dieron una mano. Pero fue una sorpresa total", contó Ardohain.
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