Luego de igualar 1-1 en el tiempo reglamentario, Talleres
derrotó 3-1 a Vélez por penales, en el encuentro correspondiente a los 16avos
de final de la Copa Argentina, y sacó boleto rumbo a octavos, donde lo
espera Huracán de Las Heras de Mendoza o Estudiantes de Río Cuarto.
Fue un partido electrizante de principio a fin. Haciendo
valer el desequilibrio de sus futbolistas más adelantados, la T intentó
manejar la pelota y lastimar al Fortín. Así llegó el primer grito de la tarde
en el Florencio Sola. A los 13 minutos, Federico Navarro apiló varios rivales a
pura gambeta, sacó un derechazo desde afuera del área que no llegó a embolsar
Lucas Hoyos y, en el rebote, Michael Santos apareció solo y abrió el
marcador.
Los dirigidos por Mauricio Pellegrino no tardaron en
responder con sus armas y, diez más tarde, tuvieron dos chances inmejorables
para nivelar el trámite: primero, Juan Martín Lucero no pudo con Marcos
Díaz, quien ya comenzaba a exhibir su importancia en la serie, y, en la acción
posterior, Pablo Galdames se lo perdió con el arco a su merced luego del
despeje del arquero.
A los 38 de la etapa inicial, los cordobeses
tuvieron en la diestra de Juan Ignacio Méndez la posibilidad de aumentar la
ventaja, pero Lucas Hoyos respondió a puro reflejo y envió la pelota al tiro de
esquina. Así, sin más emociones, se fueron al vestuario los equipos.
En el complemento siguió la misma dinámica que
antes. Talleres se replegó unos metros y buscó contragolpear con la
velocidad de Diego Valoyes, quien apenas iniciado el segundo tramo de juego
sacó un bombazo que explotó en las redes de afuera de los de Liniers, y
Vélez adelantó sus líneas y apostó por la calidad individual de Luca Orellano,
quien dio señales antes de la media hora, con un zurdazo a colocar que
llegó a puntear con la yema Díaz al córner.
Los comandados por Alexander Medina pudieron haber cerrado
antes de la noche en el Sur, a través de un intento a colocar de Guilherme
Parede tras una gran réplica y una pelota al aire que no pudo encontrar Valoyes
con la cabeza en la puerta de la valla adversaria. No obstante, cuando la serie
parecía sonreírle a la T, Lucas Janson conectó de lleno un centro rasante
en tiempo de descuento y puso tablas. 1-1 y a penales.
Desde los doce pasos, Díaz, quien venía redondeando
una gran tarea entre los postes y ya había atajado tres penales en la instancia
anterior contra Atlético Rafaela, se hizo inmenso y se vistió nuevamente
de héroe: le contuvo los remates a Ricardo Álvarez y a Pablo Galdames, sus
compañeros hicieron lo propio y, a puro nerviosismo, Talleres derrotó 3-1
a Vélez en la pena máxima y accedió a la siguiente ronda, donde lo espera Huracán
de Las Heras de Mendoza o Estudiantes de Río Cuarto.
Marcos Díaz, el hombre récord
El arquero de Talleres, que contuvo ocho penales en
Huracán y cinco con los cordobeses, llegó a 13 desvíos y superó a Marcos
Fasanella como el máximo atajador de penales en la historia de la Copa
Argentina.
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