En una noche bastante desteñida, Independiente y Huracán igualaron 1-1 en Avellaneda y sumaron un punto con sabor a poco para los dos. Leandro Fernández abrió la cuenta a los 11 minutos de la parte complementaria y Santiago Hezze igualó cinco minutos más tarde.
Facundo Ferreyra, que había ingresado a los 25 del complemento, se fue expulsado a los 45 por una falta fuerte que cerró otra noche negra para el Rey de Copas.
Tal vez la unidad le sirva un poco más al Globo, que le dio caza a Godoy Cruz en la tercera posición, a la espera de que el líder Atlético Tucumán y el escolta Gimnasia y Esgrima La Plata no sumen como visitantes y no se le escapen.
Independiente volvió a dejar mucho que desear. Cambian los entrenadores pero el equipo sigue sin aparecer y fue despedido una vez más con silbidos.
Por lo hecho en el inicio y por los diez minutos finales, Huracán mereció irse en ventaja al vestuario tras un primer tiempo impreciso, en el que a los dos equipos les costó manejar la pelota en una cancha rápida que fue regada en exceso en apariencia.
En el comienzo el Globo estuvo cerca sobre los 7 minutos cuando Fernando Tobio, tras una serie de rebotes en el área local, no llegó a conectar el balón a un metro del arco.
Hasta ahí la visita dominaba, ejerciendo mucha presión con sus hombres de avanzada y cortando los circuitos de Independiente en el centro del terreno con buenos trabajos de Santiago Hezze y Federico Fattori.
Con el correr de los minutos, Huracán perdió precisión e Independiente lo emparejó, pero por lo general el Rojo resolvió mal a tal punto que casi no inquietó a su rival. Apenas un par de centros que no encontraron el destino deseado hicieron levantar un poco a su gente.
Sobre el cierre de la etapa, el equipo de Diego Dabove retomó el comando. Creció Franco Cristaldo, quien generó la acción más clara del segmento con un disparo de 30 metros que pegó en la parte alta del palo derecho del arco de Milton Álvarez y se fue hacia un costado. Y creció Huracán en general.
Pero al Quemero se le hizo difícil al llegar al área y por eso el parcial se fue en blanco en medio del abucheo generalizado de los simpatizantes rojos a su equipo.
En el complemento el Rojo cambió un poco la actitud, aunque siguió sin estar preciso con el balón en los pies. Sin embargo, a partir de una pelota recuperada, encontró tranquilidad.
Sobre los 11 minutos Lucas Romero le pellizcó un balón a Hezze y el esférico fue a dar a los pies de Fernández, quien lo trasladó unos metros y sacó un zurdazo bajo de fuera del área inatajable para Lucas Chaves, justo cuando un murmullo tenebroso volvía a apoderarse del Libertadores de América - Ricardo Bochini.
Pero la alegría duró poco. Cinco minutos más tarde Cristaldo, uno de los más destacados, ejecutó con la calidad que lo caracteriza un tiro libre, Lucas Merolla bajó la pelota de cabeza desde la altura y en el centro del área Hezze la mandó a la red para sellar el 1-1 que se acomodaba mucho mejor a lo que había pasado en el terreno de juego.
Esa ráfaga de fútbol y goles terminó minutos después del empate visitante. Entonces volvieron las imprecisiones, el juego cortado y escasearon las jugadas frente a los arcos. Estuvo algo más cerca Huracán, pero no tuvo contundencia a la hora de la verdad y los dos terminaron sumando un punto con sabor a poco.
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