El "Expreso de Pango" se recuperó a tiempo y terminó logrando una sólida victoria sobre Unión.
En uno de los partidos por la decimosexta fecha de la Zona A, que se jugó ayer en la cancha Oficial, Estudiantes se impuso por 5 a 2, a pesar que había terminado perdiendo por 0-2 en la etapa inicial.
El equipo de Julio Páez tuvo la iniciativa en los primeros minutos, pero pagó muy caro sus errores defensivos. Iban 15 minutos cuando el arquero Franco Narváez calculó mal en la salida y Matías Pazos no tuvo otra opción que derribar a Yonathan Cabrera. El árbitro Walter Moreno sancionó correctamente el penal, que Darío Vargas cambió por gol con un remate al palo izquierdo.
Con la desventaja, Estudiantes volvió a tomar la iniciativa, aunque le costó generar ocasiones claras de gol. En la más clara, Mauricio Ortiz ganó por izquierda y sacó el centro que Ángel Bravo no pudo cabecear por muy poco y el balón le quedó a Lucas Gauna, que sacó un remate muy alto.
Pero el principal problema del equipo de Páez siguió siendo en la parte defensiva, ya que una distracción del fondo permitió otra jugada clara de Unión, en la cual Iván Lobos no llegó a empujarla y el remate de Luciano Urunaga, por el segundo palo, se fue apenas desviado.
Estudiantes siguió mostrando peligro por la franja izquierda y esta vez fue Heber Albornoz quien desbordó y sacó un centro, el cual impactó en defensor de Unión que quiso rechazar y el balón terminó dando en el travesaño.
Ya cuando el primer tiempo se moría, Unión amplió la brecha, ya que Lobos asistió a Yonathan Cabrera, quien pasó entre dos defensores y la clavó la palo derecho de Narváez para el sorpresivo dos a cero con el cual finalizó el primer tiempo.
Sin embargo, todo cambió desde el complemento, porque Estudiantes salió con otra mentalidad y rápidamente encontró los goles que le dieron aire.
Iban apenas cinco minutos, cuando Heber Albornoz sacó un fuerte zurdazo desde afuera del área que se clavó al lado del palo izquierdo de Brian Salas. Y solo dos minutos después, Federico Brizuela, que quiso sacar un centro, la metió en el segundo palo, para lograr el empate.
Desde ahi fue todo de Estudiantes, que encima aprovechó la lesión del arquero "Albo" (fue reemplazado por el juvenil Pedro de Torres) para dar vuelta la historia.
A los 33 y luego de un corner desde la izquierda, Matías Pazos puso el cabezazo que permitió revertir el resultado, mientras que los otros dos goles llegaron en el final, por intermedio de Mauricio Ortiz, y nuevamente Matías Pazos, ganando de cabeza tras un tiro de esquina.
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