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Policiales Seguridad Pública. El insólito y lamentable episodio se registró en Artigas, al costado del Easy

Fue herida en el cráneo en una gresca entre jovencitas por el robo de un celular

Se trata de una joven que sufrió un profundo corte en el cuero cabelludo. Se trenzó en lucha con otras jóvenes que la persiguieron acusándola del robo de un celular. Fue asistida y la gresca terminó con todas demoradas por la Policía.

Escribe: Enrique Vilanova

La clarísima situación de falta de control desde sus propias familias a los sectores más jóvenes de la sociedad viene generando un grave problema padre y autoridades. Así, el tema registró un nuevo capítulo y el turno fue para una jovencita cuyos datos filiatorios no fueron proporcionados, quien fue salvajemente agredida por otra jovencita con el apoyo de otras que se movilizaban en un automóvil.

Por ese ataque la jovencita sufrió un profundo corte en el cuero cabelludo con abundante pérdida de sangre y tuvo que ser asistida por los propios efectivos policiales de la Comisaría Séptima que tuvieron que luchar bastante para calmar a las enardecidas niñas que querían continuar con la agresión.

Al parecer todo se originó en uno de los barrios de a zona Sur y el grupo de adolescentes iracundas llegó en un automóvil hasta el costado del Easy, en la calle Artigas, donde atraparon antes de que ingrese a su domicilio a la supuesta ladrona de un teléfono celular que había estado junto a ellas participando de una reunión..

El tremendo episodio que pone de manifiesto la falta de control familiar sobre el accionar de los jóvenes fue éste miércoles, pasada la medianoche, en la calle Artigas, al costado del Easy, en el barrio Ramírez de Velasco.

A esa hora un grupo de jovencitas, a bordo de un automóvil maca Fiat Palio, color ladrillo llegó al lugar y sin más que decir atacaron a otra joven que se aprestaba a ingresar a su casa y que había estado con ellas. La acusaban de haber robado un teléfono celular y la atacaron, pero esta se defendió y la gresca se generalizó.

Los vecinos avisaron a la Policía y los uniformados de la Comisaría Séptima tuvieron que trabajar a destajo para frenar la gresca y calmar a las enardecidas jovencitas que pretendías continuar con la agresión.

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