Vélez Sarsfield venció 1-0 a Lanús en el estadio Néstor Díaz Pérez, por la fecha 23 de la Liga Profesional: Walter Bou convirtió el único gol del partido, que le dio un triunfazo al Fortín para seguir escapándole al descenso.
Vélez revivió y va. Al igual que contra Arsenal, consiguió una ajustada pero valiosísima victoria, y no solo por los tres puntos en sí -que no son poca cosa para un equipo que pelea abajo-, sino también por el escenario y el rival: Lanús llevaba seis triunfos al hilo jugando de local, y tan solo había perdido con River. Por el contrario, los de Liniers acumulaban seis derrotas seguidas fuera del Amalfitani.
Lanús regaló el primer tiempo y Vélez lo aprovechó. El Fortín, impulsado por el triunfo ante Arsenal que le dio un importante respiro -y también porque jugar de visitante te saca del murmullo de la gente que se genera con el correr de los minutos-, jugó con soltura. El reflejo fue la buena tenencia de pelota, algo que la V intentaba con Medina y Gareca pero sin éxito.
Claro, también con viento a favor, porque el Granate, a diferencia de lo que suele hacer -sobre todo jugando de local-, no presionó la salida. De todos modos, los de Méndez no lograban generar peligro. Sin embargo, cuando el local comenzaba a acomodarse en el campo sobre el final del primer tiempo, Vélez se puso en ventaja.
Un tiro libre de Lanús derivó en un contraataque del Fortín, conducido por Gianluca Prestianni, que corrió 70 metros con pelota dominada y dejando a tres futbolistas rivales en el camino, y tiró un centro que, ante el fallido desvío del defensor Granate, le quedó mansita a Walter Bou, que la puso contra el palo. Desahogo del delantero y de todo Vélez.
Pero para el complemento, los dirigidos por Frank Darío Kudelka cambiaron la postura: adelantaron las líneas, comenzaron a presionar arriba y se adueñaron de la pelota. Así, Lanús empezó a empujar, pero el más peligroso fue Cristian Lema -que en el primer tiempo había ejecutado un tiro libre que se fue apenas arriba-, ganando en el área rival casi todos los envíos aéreos.
En uno de ellos, un cabezazo del ex Newell's peinó el palo. Pedro De la Vega también estrelló un remate contra el travesaño y sobre el final Giannetti le ahogó el grito a Leandro Díaz. Por lo hecho en el segundo tiempo, el empate hubiese sido lo justo, pero Vélez logró aguantar la embestida Granate y se llevó tres puntos de oro de la Fortaleza.
Seis puntos de seis para el Gallego Méndez, que revitalizó a un equipo que parecía muerto: cuando asumió, Vélez se iba al descenso por tabla anual, y si bien todavía no sale del acecho sí va tomando aire, sin jugar como en algún momento el Fortín supo hacerlo, pero con efectividad. En la próxima fecha recibirá a Godoy Cruz. Lanús, que perdió su segundo partido como local en el torneo, visitará a Defensa y Justicia.
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