En el dpto. Rosario Vera Peñaloza, pese a todas las campañas de fumigaciones- la población de chinches se mantiene y en algunos casos hubo mutaciones que generan resistencia a insecticidas químicos.
Así lo explica el Bioquímico Cristian Albornoz, quien trabaja en los laboratorios del hospital Luis Pasteur del dpto. Rosario Vera Peñaloza. “El estado ha invertido mucho dinero tratando de erradicar la enfermedad sin lograr cambiar las costumbres y los hábitos de nuestra sociedad”, asegura el profesional de la salud.
En ese sentido explicó que “en la zona rural el gobierno invirtió mucho dinero para la erradicación de viviendas ranchos, sin embargo mucha gente sigue viviendo en los ranchos, ya sea por costumbre o porque al estar construidos con adobe, en verano no sienten mucho calor ni tampoco frio en el invierno, pero esos lugares deben estar limpios y alejados de corrales o gallineros”, indicó.
La presencia de la vinchuca no solo existe en la zona rural, sino también en las zonas urbanas, de hecho en los últimos meses atendieron a varias personas provenientes de barrios de la ciudad de Chepes picados por una vinchuca con Trypanosoma cruzi y se han detectado entre 6 a 10 personas con el signo de Romaña, que es la inflamación en el párpado y en el ojo –por heces depositadas por el insecto.
En ese marco el bioquímico del hospital de Chepes brindó las siguientes recomendaciones: “Mantener la limpieza de la casa, los rincones, cuadros, debajo las camas, lugares donde se acumula basura o chatarras, también en la cuchas de los perros, en los ladrillos, inclusive en la corteza de los árboles”.
“Las vinchucas se alimentan de nuestros animales domésticos como gallinas, gatos, perros y de la sangre humana que succiona cuando la persona duerme y la infección por Trypanosoma cruzi puede causar patologías, tales como: megaesófago, megacolon y complicaciones en el corazón explicó y agregó que “este mal va seguir estando presente sino cambiamos nuestros hábitos de vida”.
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