La avioneta, Gran Caravan CX modelo 028, procedente de Uruguay, se desplomó en la localidad bonaerense de Berisso a metros de una empresa petroquímica. Sus dos pilotos salvaron la vida de milagro y el accidente provocó daños en árboles y cableados del barrio.
El hecho ocurrió en la calle 78 entre 135 y 136, cuando por razones que se investigan, el piloto perdió el control y la aeronave terminó en la ciudad incendiada.
Los dos pilotos, identificados como Gastón Camacho y Ariel Canedo, fueron encontrados a pocos metros del lugar del accidente. Presentaban golpes y fracturas. Debieron ser trasladados en ambulancias al Hospital San Martín, donde quedaron internados en observación.
El más grave resultó ser Canedo, quien sufrió lesiones importantes en la pierna derecha y quemaduras en un brazo.
Respecto de la avioneta, se supo que había salido de la localidad uruguaya de Carrasco y se dirigía al aeropuerto internacional de Ezeiza. Una falla en el motor hizo que se desplomara.
Camacho y Canedo lograron dar el alerta por la radio sobre la urgencia aérea informando que tenían serias dificultades en los motores.
Hasta el lugar del accidente llegaron los bomberos del cuartel de Villa Elvira, personal policial de la comisaría Villa Ponsati y la UFI N° 5 del fiscal Juan Menucci, del departamento judicial de La Plata.
Los socorristas hallaron partes del fuselaje en la zona y ahora se procura saber las causas del accidente que estuvo al borde de ser una tragedia.
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