Un nuevo femicidio se registró este viernes. Sucedió en la provincia de Misiones, donde una mujer de 38 años murió tras haber sido rociada con alcohol y prendida fuego en su casa de la ciudad de Posadas. El ataque ocurrió el domingo pasado y, desde entonces, la víctima permanecía internada en grave estado, con más del 50% de su cuerpo quemado. Por el caso está detenido la pareja de ella.
Se trata de Ramona Isabel Morínigo, quien era madre de tres chicos de 17, 15 y 10 años. De acuerdo a la reconstrucción parcial de los hechos, Jonatan Páez, un albañil de 34 años, la atacó en medio de una discusión de pareja. La salvaje agresión se dio en una vivienda ubicada sobre calle 168, casi Humahuaca, del barrio San Onofre de la capital misionera.
Marta Ferreira, la madre de la víctima, contó ayer a la prensa que su hija y Páez “estaban adentro de la pieza discutiendo y él le pidió a ella alcohol para pasarse en las piernas porque le dolían”. Ella se lo dio, sin embargo, el acusado “le tiró el alcohol directamente y le prendió fuego con el encendedor de él”, aseguró la mujer. Y añadió: “Cuando ella llegó al hospital estaba consciente, hablaba, le venía contando a su hijo lo que había pasado”.
“Isa”, como solían llamarla, fue socorrida por sus padres y el chico de 15 años, quienes la trasladaron hasta el sector de Emergencias del Hospital Escuela y de Agudos Ramón Madariaga de Posadas. El cuadro de la mujer era muy delicado: presentaba más de la mitad de su cuerpo con quemaduras -las llamas le afectaron el rostro, el cuello, el brazo y el muslo izquierdo- y daños severos en uno de sus pulmones. En estado crítico, la internaron en la sala de terapia intensiva.
Pese a los esfuerzos médicos, la paciente falleció en las últimas horas. Fuentes de salud informaron a la agencia Télam que el deceso se produjo por una infección generalizada a raíz de las quemaduras.
Tras la triste noticia, cambió la cambió la calificación legal de la causa, pasando de homicidio agravado en grado de tentativa a femicidio. En el caso interviene el Juez de Instrucción N°1 de Posadas, Marcelo Cardozo. Se espera que Páez sea citado nuevamente a audiencia indagatoria en las próximas horas.
Según la madre de la víctima, el sospechoso “tomaba y quedaba loco, y empezaba a agredir verbalmente, era pesado”, pero ella nunca lo vio pegarle a su hija. “Hace dos años y medio que nosotros le permitimos que lo lleve a vivir con él en ese mismo terreno. Primero era un hombre pasivo, muy bueno, pero en los últimos tiempos tomaba mucho y se ponía agresivo”, dijo.
“Queremos saber qué pasó, y ella tendrá la palabra. Estamos dolidos y queremos que salga adelante y que se haga justicia. Mis sobrinos vieron cómo se le caía la piel a su madre y no quiero ni pensar cómo quedaron mentalmente al verla prendiéndose fuego y tratando de ayudarla”, agregó al medio Primera Edición Sergio Gómez, hermano de Isabel. La familia inició una colecta a través de las redes sociales para solventar los gastos de sepelio.
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