Un empresario dejó su Porsche Cayman en un taller mecánico con la intención de que le apliquen un baño de vidrio líquido. Pero el empleado del lugar no pudo resistir la tentación de probarlo y salió a acelerarlo por las calles de Villa Carlos Paz, en Córdoba. Lo terminó chocando y fue detenido por la Policía por "conducción peligrosa".
Según publican medios locales, el improvisado conductor de este exclusivo auto de altísima gama (cuesta más de 100 mil dólares) perdió el control y rompió la parte frontal del coche: terminó sobre el desnivel de la vereda, frente a una tapicería.
El hecho ocurrió durante la madrugada del viernes último, en el cruce de las calles Cárcano y Filipinas.
Al volante del Porsche iba un hombre de 32 años, pero no solo: este empleado del taller invitó al paseo a un acompañante de 27 años. Testigos confirmaron que el auto venía a "muy alta velocidad".
Todavía no está claro qué ocurrió para que el conductor perdiera el control de semejante auto. La primera hipótesis policial es que el Porsche derrapó por el asfalto mojado: en ese momento llovía fuerte en la ciudad cordobesa.
Al llegar al lugar, el Comando de Acción Preventiva entrevistó a una mujer que presenció la maniobra. Y culpó al conductor de venir en "exceso de velocidad". Por eso fue demorado.
Según publicó el diario La Voz, los ocupantes del auto (cuyo nombre no trascendió) no sufrieron lesiones. Tampoco se conoce la identidad del empresario que había dejado el auto en el taller para mejorarle la estética.
Comentarios