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Política POR LAS NUBES

Inflación de abril: cuáles fueron los alimentos que más subieron

El sector acumula un incremento interanual del 115%. Las razones de los aumentos, según especialistas consultados por Popular. En el cuarto mes del año, la inflación general llegó al 8,4%.

El dato de inflación de abril publicado este viernes por la tarde por el Indec ratificó la tendencia de los últimos tiempos y ubicó al rubro de los alimentos entre los que presentaron mayores aumentos. Esta vez, mostró una suba mensual del 10,1% y ratificó el escenario que los consumidores observan en las góndolas: lejos del retroceso, los precios de los productos se mantienen en alza.

Durante enero pasado, los alimentos habían subido 6,8%, según el organismo de estadísticas, debido al incremento de los precios estacionales de frutas y verduras, tubérculos y legumbres. Un mes más tarde dieron un salto fuerte con un alza del 9,8%, en especial por los aumentos de carnes y derivados, junto con leche, lácteos y huevos. Y en marzo treparon 9,3%, una cifra en la que volvió a incidir la suba de carnes y derivados.

Con el número difundido este viernes, los alimentos acumularon un incremento interanual del 115%, por encima del 108,8% registrado por el Índice de Precios al Consumidor (IPC) en el mismo período. "Los aumentos de este sector son el motor del proceso inflacionario que atraviesa el país. En general, suelen superar el promedio de incrementos de otros rubros que mide el Indec", aseguró Isaac Rudnik, director del Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (Isepci), al ser consultado por Popular.

Los precios al consumidor (#IPC) aumentaron 8,4% en abril de 2023 respecto de marzo y 108,8% interanual. Acumularon un alza de 32% en el primer cuatrimestre https://t.co/8cmauqFqmf pic.twitter.com/gv9uYAy2Sv

Ruudnik coincidió con otros analistas al mencionar las razones que empujaron las subas de alimentos tanto en abril, como en los meses anteriores. "La guerra en Ucrania y la sequía son dos elementos que confluyen para seguir siendo impulsores de incrementos muy por encima de los normal. Y lo cierto es que son causas sobre las que este gobierno no puede generar acciones que las contrarresten", afirmó.

"Si hay una sequía, no podés hacer nada. Y si ocurre una guerra en otro lugar, como sucede en esa zona de Ucrania y Rusia, que es una de las principales productoras de granos y alimentos del mundo, caen las consecuencias y hay que ver cómo se las va encaminando", agregó el titular de Isepci.

Cuáles fueron los alimentos que más aumentaron en abril

De acuerdo con el relevamiento oficial, el principal incremento en la división de alimentos y bebidas no alcohólicas se produjo en el kilo de tomate redondo, que en comparación con marzo tuvo una una suba del 63,4% (pasó de $462,62 a $697). Lo siguió el kilo de pollo, con un aumento del 26,4% (trepó de $612,50 a $774,33). El kilo de azúcar, a su vez, aumentó 21,1% (subió de $293,61 a $355,67).

Otros incrementos que se destacaron en la inflación de abril: huevos (20,8%), naranjas (19,8%), filet de merluza (19%), manteca (12,2%) y arroz simple (11,3%).

Más allá de la guerra en Ucrania y la sequía que atraviesa gran parte del país, Damián Di Pace -director de la consultora Focus Market- aportó otras razones que impulsaron las subas de alimentos el mes pasado. "Hubo un traslado de la disparada del dólar blue a los precios de los productos, pero también se están combinando tres cuestiones que no sólo se ven reflejadas en la inflación de abril, sino que también ocurrirá lo mismo con el índice de mayo", explicó en diálogo Popular.

Al ampliar esos tres factores, Di Pace puntualizó: "Existe una pérdida del poder adquisitivo del peso por sobreemisión en un contexto de déficit fiscal que el gobierno no logra solucionar con una caída de la recaudación tributaria real. Y a su vez, hay una restricción externa muy fuerte. Faltan dólares y estamos teniendo inconvenientes para importar insumos y materias necesarias para la producción industrial, incluso de alimentos".

Y luego agregó: "Estamos en un momento de ajuste de tarifas que también pega sobre la industria y el comercio, lo que acelera la inflación, junto con aumentos en el costo de distribución y transporte. Todos los meses sube la nafta y ahora también aumentan los peajes. Existen fundamentos para que vayamos hacia un nuevo piso inflacionario que se da más incluso en el caso de los alimentos, que son bienes de demanda inelástica y no deberían caer más allá del nivel de ingresos. Sin embargo, caen porque el ingreso ya no alcanza para comprar artículos de consumo masivo".

Por su parte, Oscar Liverotti, del Departamento de Información, Estadística y Transparencia del Mercado Central, brindó a este medio un panorama similar al analizar los efectos de la expectativa inflacionaria en frutas y verduras. "El comerciante compra caro un cajón de tomates en el mayorista y, de ahí a que venda todo el valor que pagó y recupere la plata, tarda bastante tiempo. Porque a esa mercadería casi que debe duplicarle el precio en la góndola. Y después, aparece el problema con los consumidores, a los que les cuesta mucho pagar los valores actuales. Empiezan a comprar menos porque cae su poder adquisitivo, o directamente no compran. Se retracta la demanda y se frena toda la cadena de consumo", comentó a diario Popular.

A futuro, el panorama parece no mejorar. Un relevamiento llevado a cabo por la UBA indicó que los alimentos podrían aumentar casi 200% anual en el período marzo 2023-marzo 2024. "Este problema aqueja ante todo a los hogares de menores recursos, quienes no cuentan con los medios para protegerse de las subas de los precios, dado que destinan la mayor parte de sus ingresos a subsistencia", resumió el informe.

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