Por BERNARDO STAMATEAS
Todos conocemos a alguien negativo. Esas personas que tienen la creencia de que todo les sale mal, o que el mundo entero está en contra de ellas. Y, como resultado, tienen dificultades en sus relaciones afectivas, en el manejo de sus finanzas y en la vida en general. La negatividad es una manera tóxica de ver la vida.
El negativo no es consciente de su visión pesimista pero, como resultado, atrae precisamente eso que tanto teme. En la jerga popular, a este tipo de gente se la suele denominar “mala onda” porque afectan a todo su entorno y alejan a la mayoría de las personas. ¡Nadie quiere estar cerca de un negativo!
La negatividad puede llegar a afectar seriamente la salud. La ciencia ha demostrado, a través de diversas investigaciones, que las personas positivas viven por lo menos ocho años más que las personas negativas. Los vendedores positivos venden más; los empleados positivos son menos despedidos; los amigos positivos mantienen sus amistades por más tiempo… y la lista podría continuar.
Estas son los principales rasgos de un negativo:
• Se cree una víctima de todo.
• Le tiene miedo a los cambios.
• No se cree capaz de nada.
• Alberga la creencia de que no se puede hacer nada para cambiar.
• Es obsesivo.
• Carece de motivación.
El negativo fija su atención en una sola cosa (“que no lo saludaron”, “que el clima está feo”, “que es muy difícil”, etc.). Por lo tanto, todo lo demás desaparece y no logra ver los diversos “matices” y las muchas “posibilidades” a su alrededor. Lo cierto es que cuantos más recursos tenemos a nuestra disposición, mayor libertad disfrutamos. ¿Cómo deberíamos enfrentar la negatividad propia o ajena? La mejor forma es oponiéndole la actitud opuesta, es decir, positiva. Dicha actitud sana consiste en decidir ver la vida con los anteojos de la fe, de la esperanza. Esto nos permite creer en un futuro mejor, aun en medio de la adversidad. Elegí siempre ser positivo, aunque lo que veas hoy no sea ideal, y tu mañana será diferente.
EL AUTOR
Nacido en el barrio porteño de Floresta y de ascendencia griega, BERNARDO STAMATEAS tiene habilidad para el ajedrez, el clarinete y el saxofón. Luego de cursar la secundaria en los colegios Larroque y Mariano Moreno, estudió Licenciatura en Psicología en la Universidad Kennedy. Es Sexólogo Clínico. Hace dos años que es Doctor en Psicología, recibido en la Universidad del Salvador, Buenos Aires. Es Pastor de la Iglesia Bautista Ministerio Presencia de Dios, en el barrio de Caballito, Ciudad de Buenos Aires. Destacado escritor y conferencista a nivel nacional e internacional, recorrió seis veces el territorio argentino gracias a sus conferencias. Instagram @berstamateas // facebook.com/bernardostamateas // Live 9 p.m. todos los miércoles.
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