Viajar y hacer compras son actividades que fascinan a la mayoría de los viajeros. Sin embargo, no siempre es posible combinar ambas debido a diversas circunstancias. A pesar de ello, los egipcios encontraron una manera ingeniosa de garantizar que uno de sus principales atractivos turísticos no impida las oportunidades de compra.
De acuerdo con el relato de @unviajeroauspicioso, los turistas tienen la oportunidad de comprar productos artesanales, como manteles, aunque estén en medio del río Nilo. Pero compartió que las transacciones no se realizan en una tienda o en un mercado, sino directamente desde el río y a diferentes alturas.
El modus operandi es fascinante: pequeñas embarcaciones se aproximan al crucero, cargadas hasta los topes de manteles, sombreros y otros productos. Estas barquitas son como puestos flotantes que abordan el crucero en movimiento. El vendedor muestra su mercancía y, en un acto de fe y destreza, lanza el mantel hacia la ventana de la cabina del turista interesado.
Si el producto gusto y la oferta es aceptable, después de un regateo, el siguiente paso es el pago. En el clip se puede ver como la turista pone su dinero en una bolsa que contenía artículos que no iba a quedarse y es lanzada de vuelta al vendedor en su barquita, completando así la transacción.
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