La búsqueda de Milagros Micaela Basto, de 22 años, tuvo un desenlace estremecedor. La joven, que estaba desaparecida desde agosto de 2024, fue encontrada muerta dentro de un placard en un departamento de Córdoba capital. El lugar pertenecía a Horacio Grasso, un ex policía que cumplía arresto domiciliario por otro homicidio.
El hallazgo se produjo cuando obreros que remodelaban el edificio percibieron un fuerte olor y dieron aviso a la Policía. Al abrir un placard sellado, los efectivos encontraron el cuerpo envuelto en frazadas, atado con un cable y cubierto con maderas y cemento.
La investigación apunta a Grasso como principal acusado del femicidio. Su hermano, Javier Grasso, fue detenido por encubrimiento. “Tuvimos mucho tiempo buscándola… tengo un dolor tremendo”, expresó con la voz quebrada el hermano de Milagros.
Comentarios