La trágica muerte de cuatro personas en un solo siniestro vial ocurrido el pasado viernes en la Avenida de Circunvalación volvió a poner en el centro del debate público la problemática del tránsito en la provincia. La Lic. Gabriela Romero, coordinadora del Observatorio Vial de La Rioja, confirmó que en lo que va del 2025 ya se registraron 23 víctimas fatales por accidentes viales.
Lo que genera más preocupación es que la letalidad ha aumentado, a pesar de que la cantidad de siniestros es menor a la del año anterior. “Llevamos 19 siniestros con 23 fallecidos”, explicó Romero. En 2024, el total anual fue de 60 víctimas fatales. A este ritmo, La Rioja podría alcanzar o incluso superar esa cifra.
“Los números no son solo estadísticas, son vidas, son familias rotas”, enfatizó Romero, subrayando que la mayoría de los siniestros fatales tienen causas comunes: exceso de velocidad, consumo de alcohol, distracciones al volante, falta de uso del cinturón de seguridad y cascos en motociclistas.
Además, la funcionaria destacó la importancia de la velocidad precautoria, más allá del límite legal. “No siempre la velocidad permitida es la más segura. Si me acerco a una zona con ciclistas o peatones, debo reducir aún más la velocidad”, señaló.
Romero también remarcó que no se trata solo de controles, sino de conciencia y responsabilidad personal. “No podemos tener un policía por cada conductor. La seguridad vial depende de cada uno de nosotros”, sostuvo.
El Observatorio Vial realiza tareas de capacitación continua en escuelas, plazas y empresas, intentando generar conciencia desde la niñez. Sin embargo, la sensación de muchos riojanos es que solo se actúa cuando ya es tarde. “Este fin de semana hubo controles masivos, pero muchos opinan que se hacen solo después de una tragedia”, reconoció la entrevistadora.
Con un mensaje final contundente, Romero pidió recordar que cada vez que alguien sale de su casa, alguien lo espera: “Usemos el amor como estrategia. La seguridad vial es una construcción colectiva”.
Comentarios