El Tribunal Superior de Justicia de La Rioja declaró procedente una acción de amparo presentada contra el Gobierno provincial y el Municipio de Chamical por la presunta omisión en la regulación y control de las carreras cuadreras. La denuncia señala que estas actividades se estarían realizando sin habilitación oficial, sin supervisión veterinaria ni policial, y con apuestas clandestinas.
El caso cobró relevancia luego de la muerte de una yegua llamada “Bruja India”, ocurrida el pasado 13 de julio durante una competencia en Chamical. Este hecho generó una fuerte reacción de organizaciones protectoras de animales y vecinos de la zona, que exigen la intervención del Estado para evitar nuevas situaciones de maltrato.
Protección animal y derechos en juego
La amparista argumentó que la falta de control por parte de las autoridades no solo vulnera los derechos de protección animal, sino también los derechos ambientales y la fe pública. Según la presentación, las carreras se desarrollan en un contexto irregular que pone en riesgo la integridad de los caballos y fomenta la clandestinidad.
El Fiscal General de la Provincia, Dr. Javier Vallejos, había dictaminado que tanto el amparo como la medida cautelar solicitada eran formalmente improcedentes, sugiriendo que la vía adecuada para reclamar era a través de los canales administrativos y legislativos.
Contrariamente a lo recomendado por el Fiscal, el Tribunal Superior determinó que el amparo sí tiene procedencia formal, dado que se trata de un caso donde podrían estar afectados derechos y garantías constitucionales vinculados a la protección de los animales. Esto habilita a que el expediente sea analizado en profundidad.
Sin embargo, el tribunal rechazó la medida cautelar que buscaba suspender de forma inmediata las carreras. Consideró que otorgar esta suspensión sin escuchar previamente la defensa de las partes involucradas —en este caso, el Estado provincial y el Municipio— sería violatorio del derecho al debido proceso.
La decisión judicial marca un precedente en la provincia en materia de protección animal y abre el debate sobre la regulación de las carreras cuadreras.
Organizaciones y activistas esperan que, durante el proceso, se establezcan normas claras que aseguren la seguridad y el bienestar de los caballos, así como la transparencia en estas competencias.
Por ahora, las carreras continúan, pero el avance del amparo podría derivar en cambios significativos en la forma en que estas actividades se llevan adelante en La Rioja.
Redacción Edición Digital de Nueva Rioja.
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