Los amantes de la aventura y de la naturaleza tienen un destino para agendar en La Rioja: la Reserva Provincial Laguna Brava. Es un área de 405 mil hectáreas ubicada a más de 3 mil metros de altura y rodeada por algunos de los picos más elevados de la Cordillera de los Andes.
En su colorido paisaje se destacan lagunas salinas de altura que protegen especies de aves acuáticas endémicas o amenazadas, como flamencos y parinas. Las más conocidas son Laguna Brava y Laguna de Mulas Muertas, ambas situadas a más de 4 mil metros sobre el nivel del mar.
Durante el recorrido por la reserva es frecuente ver, además, grupos de vicuñas y guanacos.
Por otro lado, esta región fue usada históricamente por los incas en su tránsito hacia Chile y para dominar a las poblaciones locales, por lo que hoy se pueden observar restos arqueológicos de valor cultural, como la fortaleza incaica del cerro El Toro.
Qué tener en cuenta para visitar la Reserva Provincial Laguna Brava
Por su carácter de área protegida, la zona puede conocerse sólo a través de excursiones guiadas y con agencias habilitadas. Todos los circuitos son diurnos.
Se recomienda llevar ropa abrigada, protector solar y gorro o gorra. Además, es importante contar con provisiones de agua y comida. Y, debido a que el oxígeno probablemente falte a esa altura, lo mejor es caminar y moverse despacio.
Cómo llegar a la Reserva Provincial Laguna Brava
La reserva se encuentra en el noroeste de la provincia de La Rioja. Las puertas de entrada a la zona son las localidades de Villa Unión y Vinchina, a 275 kilómetros y a 350 kilómetros de la capital provincial. Para llegar, hay que tomar la RN 76.
La época ideal para conocer este destino es entre octubre y marzo. Hay que tener en cuenta que, al ser un lugar en altura, puede experimentar bajas temperaturas y vientos fuertes.
Fuente: TN
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