La actividad se realizó en un espacio público y expuso parte del archivo personal del artista, en coincidencia con el Día del Fotógrafo Riojano.
La licenciada Natalia Díaz explicó que la propuesta busca acercar la obra de Ávila a la comunidad: “Estas son sus fotos, parte de su archivo que nosotros elegimos poner hoy acá para que la gente pueda conocer parte de su trabajo”. La iniciativa tendrá continuidad en el Museo de la Ciudad, donde permanecerá durante un mes.
La jornada contó además con la participación de los Talleres de Inclusión Artística Municipal (TIAM), cuyos integrantes realizaron retratos en vivo para el público presente.
Díaz recordó su propia formación en el taller de fotografía de la carrera de Comunicación Social y destacó la influencia que tuvo esa disciplina en su camino profesional: “Siempre quise ser periodista, pero cuando tuve fotografía me cambió la visión sobre la vida, el arte y las cosas. Eternizar un momento en una imagen es un proceso mágico”.
También subrayó la creciente presencia femenina en el ámbito de la fotografía: “Es un orgullo estar rodeada de compañeras y que cada vez seamos más mujeres en esta profesión, porque tenemos una mirada distinta”.
Finalmente, dejó una reflexión sobre el legado de Ávila y la esencia del oficio: “Todos podemos hacer fotos, pero no todos somos fotógrafos. Para contar con imágenes, como lo hacía el Negro, se necesita una sensibilidad especial y una verdadera pasión”.
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