Un grupo de alrededor de 70 adolescentes fue dispersado por la policía en el Parque de la Ciudad tras protagonizar maniobras peligrosas con bicicletas y arrojar elementos contundentes contra un móvil policial. Siete de ellos fueron demorados y sus rodados quedaron retenidos de manera preventiva.
El hecho ocurrió en la noche del viernes, cuando la Policía realizó los operativos en la zona.
En horas de la noche del viernes, alrededor de las 23.00, efectivos de la Comisaría Cuarta de la Unidad Regional IV intervinieron en un hecho de desorden registrado en el playón del Superdomo, ubicado en el Parque de la Ciudad.
Según el parte policial, el operativo se inició tras una modulación del operador de turno que alertaba sobre un grupo de menores que realizaba maniobras indebidas en bicicletas y causaba disturbios en el lugar. Al arribar la Unidad Móvil Leg. 873, los uniformados constataron la presencia de aproximadamente 70 jóvenes.
En ese momento, una mujer identificada como María Candela Herrera, de 36 años y con domicilio en el barrio Yacampis, informó que había pedido reiteradas veces al grupo que se retirara debido al desorden que generaban, sin obtener respuesta.
Cuando el personal policial intentó dispersar a los jóvenes, varios de ellos rodearon la unidad móvil y arrojaron piedras, botellas plásticas y residuos de bengalas de humo, situación que motivó la intervención de una segunda patrulla.
En el lugar se hizo presente personal de Asuntos Juveniles, a cargo del Oficial Subinspector Rivero, quien dispuso el traslado de los menores hasta la base de la UEAJ para continuar con las actuaciones correspondientes.
Asimismo, las bicicletas utilizadas por los menores fueron retenidas preventivamente y trasladadas a la base de la Comisaría Cuarta. Se trata de ocho rodados, en su mayoría de tipo mountain bike, de distintas marcas y colores, entre ellas STL, Vayro, SLP, Siambretta y SBK.
El informe aclara que durante la huida los menores intercambiaron sus bicicletas, por lo que no fue posible establecer con precisión la propiedad de cada una. Una de ellas, de color anaranjado y sin marca, fue abandonada en el lugar.
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